La empatía que ha desarrollado Britney con el público es asombrosa. De alguna forma ha adivinado qué era, exactamente, lo que el público necesitaba de ella en estos momentos y eso es justo lo que ha publicado. ¿Querías café? Pues toma dos tazas, ¿querías Britney? pues primero tómate dos pastillas. 'Hold It Against Me' está a un lado del abismo que separa a Britney de sí misma. Al otro lado están todos sus otros éxitos. Ninguna canción de la inocente estrella Disney había sido creada con un destino tan claro: la puta pista de baile.
'Toxic' es animada, 'Gimme More' bailonga y 'Womanizer' un poco pachanguera, pero ninguna tiene un 'beat' tan de dancefloor, tan de volverte loco bailando y olvidarte del mundo como lo tiene 'Hold It Against Me'. La letra ya lo deja bien claro. Britney está en la discoteca, ligando, y van y le ponen su canción favorita. Pensamos en un principio, al saber el título, que la cosa iría de echar cosas en la cara y de vengazas, pero no. El título de la canción es totalmente literal. Arrímate a mi.
Musicalmente es puro rave music, con un beat atronador que suena bastante al Benny Benassi más crudo y que en un primer momento te hace pensar que estás ante una versión acelerada de la canción. La mayor novedad del tema es el parón de casi un minuto que podría ser del album más raw 'The Prodigy'remezclado por Aphex Twin. También hay un resquicio de 'Celebration' (hacia el 2.45) que en realidad no es más que un poco de house ibicenco del que se apodero Madonna el verano pasado.
Parece que Britney ha vuelto a dar en el clavo. Sólo falta saber qué impacto tendrá esto en las listas americanas y cómo será el segundo single. Hay que recordar que los segundos singles de Brit siempre son mejores que el primero.
Fuente: cromosomax.com
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